Hay lugares que no se recorren, se viven. Y Costa Rica es uno de esos.
Soy Sergio Paloma, y junto a nueve agencias tuve la oportunidad de conocer este destino que es sinónimo de naturaleza, aventura y buena energía. Viajamos de la mano de Best Costa Rica, Avianca y Assist Card, tres aliados que hicieron de este FAM una experiencia completa, cómoda y, sobre todo, inolvidable.
Un itinerario que nos llevó a descubrir cuatro rincones que resumen la esencia del país: Arenal, Monteverde, Tamarindo y San José. Un recorrido entre volcanes, bosques, tirolesas, playas y una cultura que respira pura vida. Apenas aterrizamos en el Aeropuerto Juan Santamaría, la aventura arrancó rumbo a Arenal, nuestro primer destino. Nos alojamos en el Hotel Tilajari, rodeado de jardines, senderos y fauna por todos lados: aves, mariposas y un rincón especial donde pudimos hacer avistaje de ranas, un espectáculo único al atardecer.
La mañana siguiente caminamos por los senderos de Arenal 1968, con vistas al volcán que te deja sin palabras, y luego seguimos hacia la Catarata La Fortuna, una caminata que te desafía, pero vale cada paso. Después del almuerzo en Vida Campesina, el día continuó con visitas a Casa Luna, Volcano Lodge y Montaña de Fuego, donde además disfrutamos de las aguas termales rodeados de vegetación abundante. El cierre fue con cena en Casa Fortuna.
Seguimos camino hacia Monteverde, en el trayecto hicimos una parada para almorzar en Sibú Lodge, donde también aprovechamos para recorrer el hotel y su versión boutique. Monteverde nos recibió con uno de los días más divertidos del viaje. En Treetopia, vivimos la experiencia completa del Sky Tram & Walk, con vistas panorámicas impresionantes, y para nuestra sorpresa, la tirolesa, esa mezcla de adrenalina y libertad que te hace sentir parte del paisaje. Después del almuerzo, seguimos con inspecciones en El Establo y Poco a Poco, dos opciones con mucho encanto para distintos tipos de viajeros. Cerramos el día con una cena deliciosa en Kapi Kapi.
El siguiente destino fue Tamarindo, en la zona de Guanacaste, donde el viaje cambió de color y ritmo. Camino al Pacífico hicimos una parada para almorzar en Rincón de Corobicí, antes de llegar al Hotel Wyndham Tamarindo, nuestro punto de descanso y base para las visitas de los próximos días. El paisaje pasó de la niebla al sol brillante, y el mar se convirtió en nuestro nuevo escenario. Tamarindo nos sorprendió con una oferta hotelera de primer nivel. Recorrimos Jardín del Edén, Tamarindo Diriá, W Costa Rica y Westin Playa Conchal, donde además almorzamos y aprovechamos para conocer su propuesta all inclusive de lujo. Entre playas doradas, atardeceres perfectos y gastronomía deliciosa, entendimos por qué esta zona es ideal tanto para parejas como para familias que buscan relax con estilo.
El tramo final nos llevó a San José, capital y cierre del recorrido. Después de un almuerzo en Caballo Blanco, hicimos check-in en el Hotel D Sabana, donde además realizamos la inspección final. Una cena tranquila en el hotel nos dio la oportunidad de hacer el balance de una semana intensa, llena de descubrimientos y momentos únicos.
Volvimos temprano, pero la cabeza quedó allá: entre volcanes, selva y mar. Costa Rica tiene eso, te desconecta del ruido y te deja con ganas de volver.

Algunos tips para agencias
- Segmentación: Costa Rica es ideal para quienes buscan aventura, naturaleza y autenticidad. No es solo playa; es un combo de experiencias.
- Duración recomendada: mínimo tres noches en cada zona para disfrutar sin apuro.
- Temporada alta: de diciembre a marzo (verano local). En esos meses, es mejor evitar el open voucher por la alta demanda y las distancias.
- Perfil del viajero: amantes del ecoturismo, de los deportes al aire libre y de la fauna. Ideal para quienes quieren una experiencia diferente del Caribe tradicional.
Si tuviera que resumirlo en una frase, diría que Costa Rica se vive con todos los sentidos. Los sonidos de la selva, el olor a tierra mojada, la energía del volcán, el sabor del café local y la calidez de su gente hacen de este destino un lugar que te marca.
Un agradecimiento enorme a Best Costa Rica, Avianca y Assist Card por la organización, la atención al detalle y por acompañarnos en cada tramo del camino.